VIDA SANAPrincipios y consejos prácticos
para desarrollar una vida saludable |
Sabemos que la lectura influye positivamente en la salud y calidad de vida de las personas, por eso en este artículo le presentamos algunos de sus beneficios y 7 estrategias prácticas para desarrollar este hábito tan saludable: La lectura ayuda a nuestro cerebro:
Tomar pausas a lo largo del día para generar rituales de lectura nos permite descansar y relajar la mente de preocupaciones laborales y personales. La lectura distrae, entretiene y nos permite alcanzar un adecuado equilibrio ocupacional incorporando fácilmente momentos de ocio. ¿Cómo desarrollar el hábito de la lectura? 1. Busque algo que le apasione Primeramente, seleccione un tema que le apasione, que le entusiasme. No podrá disfrutar del placer de leer si no se enfoca primeramente en temáticas de su interés. ¿Qué actividades son de su agrado? Busque materiales vinculados a sus deseos y necesidades. 2. Empiece con algo simple Comience leyendo artículos, revistas y libros que contengan capítulos cortos. Libros extensos pueden generar sentimientos de frustración. 3.- Cree el hábito Es preferible leer todos los días 1 página y ser constante con esta meta, que pasar una o dos horas con un libro para luego abandonarlo por unas semanas. La disciplina, es el puente entre las metas y los logros. 4.- Busque un/a compañero/a de lectura Comprométase con algún amigo, con su pareja o alguna persona a fin de leer juntos un libro de una temática que los identifique y les permita generar temas de conversación y lindos debates. Arme un cronograma de lectura, pauten plazos realistas de lectura para ir avanzando. 5.- Escriba No olvide realizar anotaciones en una libreta de las ideas principales o detalles que capten su interés. Puede marcar su libro con diferentes colores y realizar notas al margen a fin de favorecer la concentración y organizar nuevas ideas o conceptos. 6.- Elija el lugar y el horario adecuado Para favorecer el hábito de la lectura, recomendamos que dedique entre 15 minutos a media hora todos los días, en un mismo lugar y un mismo horario. Esto le permitirá crear un ritual ocupacional libre de distracciones y hacer de ese momento, un espacio para su desarrollo personal. 7.- Use su formato correcto Muchas personas se sienten cómodas leyendo desde un formato digital pero otros sin embargo no logran acostumbrarse: Necesitan sentir la textura y el aroma tan particular de un libro. Lo importante es que respete sus necesidades y que esto no se transforme en una piedra de tropiezo para que arranque esta aventura. Puede descargar el EBOOK 2022: ![]()
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A usted... ¿Qué le gusta leer? ¿Qué consejos puede sumar a este artículo para fomentar el hábito de la lectura?
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El frío afecta nuestras rutinas. Muchas veces mirar una serie y comer algo rico es más tentador que salir a correr.
Lo mismo sucede con nuestra alimentación y el resto de los hábitos. Las bajas temperaturas influyen en nuestro comportamiento y debemos estar atentos a no cometer errores que condicionan nuestra salud. 1.- Durante el invierno nos volvemos más sedentarios. Es importante incorporar rituales de ejercicio dentro del hogar. Hacer rutinas de estiramientos, gimnasia online o ver videos por youtube pueden ser una buena alternativa cuando las temperaturas son muy frías y por las mañanas nos resulta difícil hacer ejercicio al aire libre. Ir al gimnasio y tener tu entrenador personal es sin duda la mejor opción porque nos ayuda a ser disciplinados con el ejercicio físico evitando la procrastinación y la falta de constancia. Media hora todos los días hace una gran diferencia. Empezar con metas cortas nos ayuda a no frustrarnos y salir de la zona de confort a la que el invierno nos invita. 2.- Cuando hace frío comemos más En invierno, las ensaladas y las frutas no suelen ser muy apetitosas. Nuestro cuerpo requiere más calorías y solemos proveerlas con hidratos de carbono y platos calientes. Por otro lado, algo que influye a comer más es el sedentarismo y de esta forma entramos en un círculo vicioso que terminará influenciando en nuestro peso. Beber mucha agua: 2 litros como mínimo por día. Incorporar snacks saludables, frutas, yogur, turrón, frutos secos pueden ser una buena opción. Por otro lado, si evitamos comprar comida chatarra o la dejamos lejos de nuestro alcance es muy probable que comamos mejor. Tomar infusiones calientes pueden ser una buena alternativa cuando estamos tentados a “picotear algo rico” 3.- Evitemos el encierro… Cuando las temperaturas son bajas, las ventanas están cerradas. Esto afecta la ventilación adecuada de los ambientes y la correcta circulación de aire. Si a esto le sumamos la aglomeración de gente, puede transformarse en una combinación nefasta, especialmente en tiempos de COVID. Crear el hábito de ventilar los ambientes en momentos que no permanecemos en dichas habitaciones puede ser la solución para no sentir frío en nuestro propio hogar. |